La arrogancia se paga en los mercados financieros. Y muy caro. Nunca debemos perder el respeto por el ciclo económico. Y en las últimas semanas eso había pasado.
El coronavirus ha sido el catalizador que está volviendo locos a inversores, analistas y gestores. Pero el que estuviese posicionado en la desaceleración ha podido dormir tranquilo estos días. Se ha vuelto a demostrar que el análisis técnico necesita del macroeconómico, fundamental y el sentimiento para ser una herramienta mucho más potente.
¿Y ahora qué? Mientras muchos soportes se han visto atravesados como mantequilla, la gran masa sigue viendo la caída como una oportunidad. Sin embargo, tenemos lecturas en indicadores que nos marcan cautela aún y que se podría seguir cayendo de manera estrepitosa. ¿Lunes negro?¿Vuelta en V? No seré yo quien apueste por eso aún. Llegará el momento de posicionarnos para un rebote. Pero ese momento aún no ha llegado.
¡Esta semana no hemos hecho ningún movimiento! Pero pronto vamos a tener que tomar beneficios en algunos e incrementar en otros que nos pueden dar oportunidad siguiendo la Guía de Inversión.
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